CAPITULO V: SALVACIÓN (Memorias Mick)

Haciendo "play" en el botón indicado, disfrutemos de una breve introduccion audiovisual al Capitulo V de "Memorias de Mick"

..::**SALVACION**::..

TITULO: MEMORIAS DE MICK
AUTORA: HARMONY
TRADUCCION AUTORIZADA POR LA AUTORA A .:*M&M*:.
TRADUCIDO POR: ..::*Mrs.Hudson*::..
GENERO: (Mick/Beth) Basado en Moonlight.
CATEGORIA: Todo Público
CLASIFICACION: Universo Alterno.
PERSONAJES: Mick/Beth y el resto de los personajes originales de la serie.
ADVERTENCIA/SPOILER: Se desarrolla paralelamente a la serie.

DECLARACION: Warner Bro. TV y Silver Picture son los propietarios de los Derechos sobre la serie Moonlight, sus personajes, su argumento y todo aquello derivado o consecuencial a la misma. Al mismo tiempo, Trevor Munson y Ron Koslow han sido los creadores originales de los personajes, argumentos y situaciones en los que se basa el presente relato. No se pretende la infracción de derechos de autor o de propiedad sobre ellos. Asimismo, no existe ningún ánimo lucrativo con el siguiente relato. Sin embargo, su contenido pertenece de forma integra a su autora.


MEMORIAS DE MICK
CAPITULO V: “SALVACIÓN”

He pasado horas sentado en mi apartamento, perdido en mis pensamientos mientras el trabajo se amontona en la oficina. Mi buzón de voz tiene una docena de mensajes, cuatro de ellos son de ella. A excepción de esos, los demás no me interesan en lo absoluto, bueno, Josef también llamó un par de veces, y si no le devuelvo la llamada pronto, seguramente vendrá por aquí y no quiero verlo.

No estoy listo para ver a nadie todavía. No puedo dejar de pensar en eso. Lo reviso una y otra vez, preguntándome si pude haber manejado las cosas de otra manera. Pero, honestamente, no veo cómo.

Mirando en retrospectiva, evaluando todo lo que pasó la semana pasada, puedo tan sólo decir que de no ser por ella estaría muerto… pero muerto de verdad. Estuvo cerca, demasiado cerca. Sin embargo, ahora siento que la muerte real, sería preferible a esto.

Beber su sangre con el fin de sobrevivir me ha devastado completamente. Ese patrón perturbador que he notado acerca de Beth estando allí cuando más la necesito, se está convirtiendo rápidamente en un aspecto distintivo de nuestra relación. Pero esta vez, ella hizo más que salvarme; ella se puso en peligro para que yo pudiera sobrevivir.

Todo comenzó de una manera tan simple.

Cuando Beth llamó y preguntó si podría venir a mi casa, no tenía idea de que venía con su novio. Resulta que Josh era el motivo de la visita. Necesitaba a alguien fuera del sistema que lo ayudara a encontrar a su testigo estrella desaparecida. No sé por qué tomé el caso; tal vez para quedar bien enfrente de Beth, o posiblemente para impresionar a Josh. Sea cual sea la verdadera razón, no es importante ahora.

Sólo una cosa es importante; esto llevó a la ruptura de mi integridad y nada volverá a ser lo mismo.

Puedo asegurar que al principio disfruté bastante con la idea de trabajar tan cerca de Beth, ella era mi enlace con Josh y tengo que admitir que estaba muy impresionado por su habilidad de conseguir información. Tiene contactos por los que yo mataría… bueno… hipotéticamente hablando, por supuesto.

Hemos seguido juntos las pistas y terminamos justo en frente de la casa de Jack Tolland. Beth me aseguró que estaba bien con toda la información que maneja sobre mi pasado: Lo de Coraline convirtiéndome, la estaca en casa de Pollock; todas las cosas de vampiros que no estaba seguro que ella pudiera asimilar. Pero ella parecía no tener problemas con eso y saberlo, de alguna manera, me hacía sentir feliz.

No podía creer que ella me dijera que era una “flor delicada” por mi sensibilidad al sol. Ciertamente era la primera vez que alguien se atrevía a decirme algo así.

Nos las arreglamos para conseguir una pista sobre el paradero de Leni, pero luego tuve que insistir en que siguiéramos caminos distintos.

No había necesidad de ponerla en peligro, y de alguna manera sentía que si iba conmigo a buscar a Leni, Beth estaría así… en peligro.

Cuando Beth me dijo que éramos un muy buen equipo, tuve que sonreír porque en realidad lo somos. Pero no quiero alentarla. El peligro es un elemento que siempre va de la mano con mi trabajo y no quiero que ella resulte afectada.

Encontrar a Leni fue pan comido. Estaba esperando por ella en Victorville cuando se bajó del autobús. Mi acercamiento pudo haber sido más suave. Ella estaba realmente asustada y me disparó en el brazo, pero cubrí la herida bastante bien.

Gracias a Dios por la velocidad de curación vampírica.

Mientras hablaba con esta muchacha, escuchaba un suave y extraño eco que no podía identificar. Era como un pequeño ruido de fondo que al principio no notas, pero gradualmente te percatas de él. Finalmente me sorprendió cuando estábamos en la puerta del café, que eran los latidos del corazón del hijo que llevaba dentro de ella. Ahora todo empezaba a tener sentido.

Cuando Josh supo que había encontrado a Leni, me ordenó esperar al departamento de policía de Victorville para que nos escoltaran. Me opuse a eso desde el principio, yo trabajo mejor solo. Pero este era el caso de Josh y esa era su orden, no tenía más alternativas. Cuando el oficial se presentó, algo estaba mal en él, y lo reconocí del flash que tuve en la casa donde protegían a Leni. Sólo me tomó unos pocos minutos para sacar a Leni de ahí y robar el auto de policía; ésta no fue precisamente una de mis más brillantes ideas, en retrospectiva.

Después de ser perseguido por un helicóptero lanzando misiles, Leni y yo apenas pudimos escapar del carro antes de que fuera convertido en una bola de fuego. Nos dejaron a pie en el desierto, con el inclemente sol sobre nosotros. Esto significaba la muerte segura para un vampiro y tampoco era lo ideal para una mujer embarazada. Pero sabía que ella lo enfrentaría mucho mejor que yo.

El peligro más grande que enfrenta un vampiro no es otro vampiro, o incluso la necesidad de sangre. La decadencia de nuestros cuerpos es el problema. Desde el momento en que nos convertimos en muertos vivientes, nuestros cuerpos comienzan a descomponerse.

Esa es la razón por la cual dormimos en congeladores… se ralentiza en gran medida la putrefacción.

Estar bajo el sol, o en una cantidad considerable de calor extremo, causa una aceleración de la destrucción celular y hace efecto rápidamente. Nunca verás a un vampiro afuera sin un montón de prendas de vestir, cubriendo tanta piel como sea posible para minimizar los daños. Cuando Leni y yo empezamos a caminar por del desierto, sabía que no iba a terminar bien.

Un vampiro experimentado tiene un control total de sus pensamientos y acciones. Sabe dónde se encuentra en cada situación. Los sentidos vampíricos están fuera de la escala y nos permiten tener el mando y el control. Yo estaba perdiendo esa ventaja. Mis sentidos estaban entorpecidos.

Estaba teniendo dificultades para concentrarme y tener a Leni a mi lado se estaba convirtiendo en una distracción. Después de aproximadamente una hora en el desierto, realmente empecé a tambalearme. Podía sentir las células en mi cuerpo reaccionando al calor. Cada pocos metros me tropezaba mientras mis piernas perdían la fuerza para mantenerme en pie. Leni me sostenía, colocando su brazo alrededor de mi cintura, ayudandome a caminar.

Me tomó cada gramo de concentración seguirle el paso, poder poner un pie delante de otro. Cada célula de mi cuerpo estaba ardiendo, como si estuviera quemándome de adentro hacia afuera.

Cada paso era más y más agonizante; especialmente con el sonido de la sangre de Leni corriendo por sus venas. Su embarazo ha aumentado el volumen de su sangre y era casi como encender un altavoz de un estéreo en mi oído. Había prometido proteger a esta chica y al bebé que llevaba dentro, pero mi determinación de mantenerlos a salvo rápidamente estaba siendo probada y ya no podía contar con el propósito de detener mi naturaleza.

Podía sentir el aumento de la sed de sangre en mí. Estaba luchando en dos batallas muy reales: Una para mantenerme enfocado y con la conciencia intacta, y la otra para poner al margen al vampiro en mi interior. La verdad era, que no estaba seguro de poder conservar el control por mucho tiempo. A medida que deambulábamos por el desierto, Leni sabía que algo estaba realmente mal en mí.

Le había quitado la chaqueta que estaba amarrada en su cintura y la usé para cubrir mi cabeza. Ella insistía en querer detenerse, pensando que yo necesitaba descansar y no podía decirle que detenernos significaría una muerte segura para mí.

El viejo y destartalado motel surgiendo de la nada en medio del desierto fue increíble. Al principio, pensé que estaba alucinando, pero Leni también lo vio. De hecho, ella lo vio primero. Apenas recuerdo como lucía la habitación, sólo se que estaba muy deteriorada. Para el momento en el que entramos, mi mente apenas estaba funcionando. Recuerdo haberle dicho a Leni que buscara hielo, mucho hielo. Y de alguna manera me metí en la bañera.

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El agua fría fue un shock para mi sistema y me dio un alivio temporal del calor. En el momento en que el hielo cayó al agua, yo podía sentir la diferencia. Pero era un poco tarde. El daño ya estaba hecho. Sin sangre fresca, era sólo cuestión de esperar, una especie de ruleta rusa en la cual todos seríamos perdedores si no conseguía apartar a Leni de mi. Básicamente, ella estaba peor que yo, corría peligro si caía en manos de los que la perseguían, pero también corría peligro quedándose ahí conmigo.

Leni asaltó el mini-bar y me ofreció comida pensando que iba a ayudar. Pero yo la aparté bruscamente. Ella no entendía la ironía: Ella era la comida… o más bien era la botella que transportaba mi comida. Y aun en mi estado de desorientación, el hecho de que ella tenía más sangre que la que acostumbraba a sentir a mi alrededor, ponía más alerta mis instintos. Dios, quería drenarla. Nunca luché contra un impulso tan fuertemente en mi vida.

Después de cincuenta y cinco años, y en otras condiciones, haber mantenido al monstro sumergido habría sido un ejercicio que requería tan sólo un mínimo esfuerzo. Pero ahora, cuando más necesito tener el control, mi vampiro interno me estaba ganando. Estaba perdiendo contra él, y cuanto más trataba de frenarlo, me hacía más débil y perdía más el control.

Estaba atrapado entre dos mundos; irónicamente en el lugar donde sentía que había estado desde mi conversión. Pero esta vez, no podía tomar la decisión acerca de en cual lado estar; estaba pereciendo en este infierno… todo parecía estar perdido. Después que le ordené a Leni que se fuera del baño; diciéndole que llamara a Beth, traté de concentrarme y dejar que el agua fría adormeciera mi mente mientras enfriaba mi piel. Caí en una especie de trance, pero sabía que lo necesitaba para mantener el poco de cordura que me había quedado. El asesino se estaba acercando, era sólo una cuestión de tiempo.

Estaba tan adormecido que ya no podía distinguir la realidad de mis alucinaciones. En mi mente, ya estaba muerto; iba deslizándome cada vez más en el olvido. Yo ya no existía y sólo mi cuerpo físico se aferraba a los vestigios de esta tierra. Se había acabado.
Ni siquiera sentí cuando mi cabeza se deslizó debajo del agua fría. Silenciosamente esperé por la paz que sólo la muerte real podía traer.

¿Y no era esto lo que había querido desde el comienzo de mi existencia como muerto viviente? Finalmente, conseguiría mi liberación.

Y entonces de repente estaba siendo sacudido, y sentía el aire golpear mi cara. Abrí los ojos y vi a Beth delante de mí. Pero yo sabía que no era real, sólo la misma alucinación que había estado teniendo. Mi mente ya no podía concentrarse y la línea entre la realidad y la fantasía se había desmoronado. Cada célula de mi cuerpo se separaba de la siguiente.

Increíblemente, esta vez me habló, era real. ¿Sería posible? Saqué lo poco de conciencia que me quedaba y pude centrarme en su cara; en los hermosos ojos azules que yo conocía tan bien. En realidad era ella. Cuando vi la angustia y el pánico en su cara, traté de hacer una broma, diciéndole que yo era una flor delicada después de todo.

Eso trajo una sonrisa inquieta a su cara.

Yo sólo quería que Beth tomara a Leni y la llevara a un lugar seguro. Pero una vez que vio el estado en el que me encontraba, no pudo abandonarme. Mientras sostenía mi rostro con sus manos, la miré a los ojos, y me golpeó fuertemente el entender que donde debía haber miedo solo estaba presente una mirada de compasión, algo que decía que yo le importaba.

Sin duda vi en los ojos de Beth la expresión misma del amor, amor por mi.

¿Cómo puede ser esto posible? ¿Es sólo mi imaginación? ¿Mi mente estaba tan desubicada que estaba viendo lo que yo quería ver? Los monstruos como yo no merecen el tipo de amor y devoción que ví en ella. Odio esto. Me odio a mí mismo por estar en la situación de tener que alimentarme de ella. No quería que fuera así. Morderla por primera vez debería haber sido un intercambio íntimo en vez de uno desesperado.

Ok, lo admito. Algunas veces he pensado en cómo sería intimar con Beth. De hecho, a veces he deseado sentirla en mis brazos, besarla, acariciarla y dejándome llevar. Imaginándome cómo sería hundir mis colmillos en su hermoso cuello justo en el momento preciso y apasionado. Así es como debería ser la primera mordedura entre amantes; una manera de satisfacer la lujuria en ambos.

Las mordeduras de vampiro pueden ser sólo mordeduras; una manera para recuperar sangre. O en la circunstancia apropiada, también pueden proporcionar un placer intenso para el receptor.

¡Ufs! está bien, tengo que alejar de mi estos sentimientos. Nada bueno queda de eso. Los seres humanos son demasiado frágiles; el sexo con nosotros rara vez termina bien. Y estoy decidido a mantenerla a salvo, sobre todo de mí.

Cuando se echó el cabello a un lado exponiendo su cuello, su intención fue clara. Ella sólo sabía lo que implicaban los mitos de los vampiros comunes; los vampiros siempre muerden en el cuello. El hecho de que estaba tan dispuesta a confiar en mí cuando yo estaba en el momento menos confiable, eso hacía que me doliera mi corazón. Le grite que se fuera, que lo que propuso era impensable. Pero ella se mantuvo firme. No iba a dejarme morir si su sangre podía salvarme. Y me salvaría, pero ¿a qué costo?

Recuerdo que la mire a los ojos y pensaba… “¿Qué haces cuando lo único que necesitas para salvar tu vida es lo único que la haría insoportable?”

Porque insoportable es en lo que se ha convertido mi vida desde que tuve que beber su sangre. La ironía no se ha ido. ¿Cuántas víctimas involuntarias he drenado para que esa sangre me sustentara? Y ahí estaba ella, la pequeña niña, por la que yo había arriesgado todo a cambio de rescatarla, allí estaba ella ofreciéndome voluntariamente su sangre para darme la salvación.

Cierro los ojos cuando recuerdo los sentimientos que me invadieron en cuanto tome su brazo, lo voltee con la muñeca hacia arriba, y sentí la sangre corriendo a través de él. Su aroma fue abrumadoramente embriagador. Los sentimientos contradictorios que luchaban dentro de mí causaron una agonía de otro tipo. Mi alma, si es que realmente me queda una, era un torbellino.

Yo le advertí que tendría que detenerme en algún momento porque en mi estado de deterioro avanzado, yo sabía que había perdido toda apariencia de control. Pero no había ninguna opción real y yo lo sabía. Si me moría, el asesino encontraría a Beth y a Leni. Yo era su única esperanza de liberación, y una vez más, Beth era mi única salvación.

Sentí cómo se estremeció por el dolor cuando mis colmillos perforaron su piel suave y cómo se sostenía contra mi hombro. Mi cerebro gritó para que me detuviera en ese momento, pero yo era incapaz de hacerlo. Sentí su sangre caliente fluyendo dentro de mí y mientras el sabor real era tan dulce como el vino, estaba contaminado con la amargura del arrepentimiento.

Lo que debería haber sido una experiencia íntima y sensual, se redujo a una de angustia y dolor. ¿Cómo voy a superar esto? Y más importante aún, ¿cómo puedo seguir permitiendo que Beth sea parte de mi mundo cuando en repetidas ocasiones pongo su vida en peligro? Me he comprometido a protegerla y eso es exactamente lo que voy a seguir haciendo. Pero no puedo evitar preguntarme, ¿en qué momento el protegerla se transformará en un perjuicio… para los dos?

En el momento en que su sangre empezó a refrescarme, me di cuenta que si antes había existido una conexión entre nosotros, esto la selló con un pacto de sangre. Desde ahora, ella siempre sería una parte de mí desde el punto de vista físico, así como lo ha sido espiritualmente desde que la aleje de Coraline. Esto debería hacerme feliz ¿verdad? Pero no es así, porque sé que mientras ella esté en mi vida, será un imán para el peligro.

Es sólo la naturaleza de mi existencia y arrastrarla conmigo no es una opción.

Ella nunca estará completamente segura mientras esté a mí alrededor. Pero ¿cómo puedo desterrarla de mi vida? Destrozaría mi interior; ella es la razón de mi existencia. Por supuesto que continuaré, pero la esencia de mi ser se irá y divagare por toda la eternidad como una sombra de mí mismo. Cuando Beth me pidió que me detuviera, retiré mis colmillos de su brazo pero el sangrado continuaba. Envolví su brazo en una toalla y la sostuve por un momento.

Ella me miraba a los ojos y yo no tenía palabras. ¿Qué podía decir? Mi cuerpo estaba reviviendo, pude sentir mi fuerza regresar, mientras sentía que la de ella disminuía. Esto estaba mal. Nunca estaré en paz por ello.

Beth se levantó sin decir una palabra y salió del baño. ¿Cuánto tiempo había pasado? El tiempo no importaba. Me puse de pie y tuve que estabilizarme. Iba a tomar unos pocos minutos antes que pudiera volver a caminar. Oí a Beth llamando a Leni y no hubo respuesta. ¿Era demasiado tarde?

Con mi restaurado oído de vampiro escuché el grito ahogado de Beth. Cuando sentí el golpe del hombre cerca de la puerta del baño, la atravesé, lo agarré y rompí su cuello. Se sentía tan bien que mi fuerza sobrehumana estuviera de vuelta.

Me sentía como yo de nuevo. Entre a la habitación y le pregunte a Beth si estaba bien. Leni apareció de las sombras del lugar donde se escondía y me hizo la misma pregunta. Tuve que admitir que me sentía mucho mejor. Entonces ella se arrojó en mis brazos para estrecharme y todo lo que yo podía hacer era mirar a Beth sosteniendo la toalla ensangrentada envuelta en su brazo, un tácito recordatorio de la última media hora; ese trozo de tiempo suspendido para siempre entre mis remordimientos.

¿Será que en adelante ella se convertiría para mí más que una necesidad, en una adición?.

Sentado aquí, hundido en mis pensamientos, de repente sentí a Beth parada afuera de mi puerta. Tener su sangre corriendo por mis venas me permite sentir su presencia cuando está cerca. Miré el monitor y efectivamente, estaba apoyada contra la puerta. Ella tocó, pero me negué a abrir.

Verla ahora sería difícil; me atormenta demasiado el recuerdo de haber tenido que alimentarme de ella. Mi vergüenza es demasiado profunda y me desprecio tanto por esto como para enfrentarla tan pronto.

Todo este incidente me ha perturbado más allá de la razón y tengo que encontrar una manera de resolver este problema. Podía realmente "sentir" su cuerpo como me apoyé en la puerta... casi como si el acero entre nosotros no existiera.

Podía oír los latidos de su corazón y su calor. ¿Será igual para ella?

Muchos pensamientos pasan por mi cabeza, pero el que destaca es que ella está en peligro cuando está a mi alrededor y por eso, esto tiene que parar. Pero, ¿cómo voy a aguantar sin mi razón para vivir?